Ismael “El Mayo” Zambada, uno de los líderes más buscados del narcotráfico mexicano, fue arrestado por agentes estadounidenses en un audaz operativo conjunto que también resultó en la captura de Joaquín Guzmán López, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán. La noticia fue reportada inicialmente por el The Wall Street Journal y confirmada por el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
La detención se llevó a cabo tras varios meses de operaciones encubiertas de la Oficina de Investigaciones del Departamento de Seguridad Nacional y el FBI. Zambada, creyendo que iba a inspeccionar pistas clandestinas en México, fue engañado para volar a Texas, donde finalmente fue arrestado. Guzmán López, quien también estaba a bordo del avión, fue detenido junto con él.
Según fuentes de seguridad, Guzmán López atrajo a Zambada a bordo del avión bajo falsos pretextos. Se espera que ambos comparezcan ante el Tribunal Federal de Distrito en Chicago en los próximos días, aunque aún no se ha confirmado dónde será procesado Zambada.
El fiscal general Merrick Garland calificó al Cártel de Sinaloa, cofundado por «El Mayo» y «El Chapo», como «una de las organizaciones de narcotráfico más violentas y poderosas del mundo». Garland subrayó que ambos capos enfrentan múltiples cargos en Estados Unidos por dirigir las operaciones delictivas del cártel, incluidas sus redes de fabricación y tráfico de fentanilo.
Esta operación destaca la colaboración entre las autoridades de EE.UU. y México para combatir el narcotráfico y muestra un significativo golpe a una de las organizaciones criminales más notorias del mundo.
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