Apple ha lanzado iOS 18, la última versión de su sistema operativo para iPhone, compatible con modelos a partir del iPhone Xs. Con esta actualización, la compañía introduce una nueva función destinada a disuadir el robo de iPhones, enfocándose no solo en el dispositivo completo, sino también en las piezas que podrían ser reutilizadas de manera ilícita.
Aunque esta nueva función no evita que te puedan robar físicamente el teléfono, Apple ha estado añadiendo una serie de capas de seguridad a lo largo del tiempo. Estas medidas dificultan tanto la reventa del dispositivo como la reutilización de partes en servicios técnicos no oficiales. Desde hace tiempo, Apple requiere claves para reiniciar un iPhone de fábrica, detectar usos en ubicaciones no habituales, y ahora con iOS 18, la empresa busca frenar el uso de piezas de repuesto de teléfonos robados.
Un paso más en la seguridad del iPhone
Con iOS 18, Apple introduce una extensión de su sistema de Bloqueo de Activación, una función que pertenece al servicio Find My para bloquear y rastrear dispositivos robados. Esta función estaba limitada, hasta ahora, a evitar que un iPhone robado fuera activado por otro usuario o reiniciado para ser vendido como nuevo. Con la nueva actualización, el Bloqueo de Activación también se extiende a las piezas clave del dispositivo, como la pantalla, la batería y los sensores, impidiendo que puedan ser reutilizadas en otro teléfono.
Según Apple, “cada vez que se activa o recupera un iPhone o iPad, el dispositivo se pone en contacto con Apple para comprobar si el bloqueo de activación está activado. Nadie podrá desactivar Buscar, borrar los datos del dispositivo ni reactivarlo sin la contraseña de tu ID de Apple o el código del dispositivo”. Ahora, esta medida de seguridad se amplía, y si las piezas de un iPhone robado son instaladas en otro equipo, aparecerá una alerta que notificará al usuario sobre su origen sospechoso.
¿Cómo afecta a los servicios técnicos?
El nuevo sistema de iOS 18 está diseñado para que los servicios técnicos no oficiales no puedan usar piezas robadas sin que los usuarios sean alertados. Si una pieza es detectada como parte de un iPhone marcado con Bloqueo de Activación o Modo Perdido, el equipo mostrará una advertencia en la Configuración, indicando que la pieza es «desconocida». Aunque no impide completamente su uso, esta advertencia generará desconfianza y alertará al usuario sobre el posible origen ilícito del repuesto.
Apple explica que “si un dispositivo en reparación detecta que una pieza compatible procede de otro dispositivo con Bloqueo de Activación o el Modo Perdido activados, se restringirán las funcionalidades de calibración para esa pieza”. Esto significa que la pieza funcionará, pero no de manera óptima, ya que la calibración es un paso esencial para que los componentes trabajen correctamente en el nuevo dispositivo.
Trazabilidad y transparencia
Además de proteger contra el robo de piezas, Apple busca mejorar la transparencia en las reparaciones. Con iOS 18, la compañía ofrecerá un historial de piezas y servicios, permitiendo a los usuarios verificar si una parte es original, usada o nueva. Esto responde a la creciente demanda de los consumidores por conocer más sobre el origen de los componentes que se utilizan en sus dispositivos.
Esta trazabilidad es clave para evitar que los usuarios sean engañados por servicios técnicos que instalen piezas usadas, haciéndolas pasar por nuevas. Según Apple, la nueva función de iOS 18 se asegurará de que los usuarios sepan si la pieza instalada ha sido previamente usada o si es totalmente nueva.
¿Qué impacto tendrá esta medida en el mercado de repuestos?
El anuncio de iOS 18 y su nueva función de bloqueo de piezas ha generado un debate en la comunidad de reparaciones. Mientras que algunos argumentan que esto protegerá a los usuarios de ser víctimas de fraude, otros advierten que podría limitar la reutilización lícita de piezas, perjudicando a aquellos que prefieren vender o reutilizar componentes en lugar de invertir en una reparación costosa.
Sin embargo, Apple asegura que la función no afectará a piezas reutilizadas de manera legal, siempre y cuando estas no estén asociadas a un iPhone robado. La función de «calibración» permitirá que las piezas usadas funcionen correctamente en el nuevo equipo, aunque la alerta de «pieza desconocida» seguirá apareciendo, algo que podría generar dudas entre los usuarios.
Con esta nueva función, Apple refuerza su compromiso con la seguridad de sus dispositivos y la protección contra el robo de iPhones, ampliando las barreras que ya había establecido para impedir que los teléfonos robados fueran reutilizados o revendidos
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