En una decisión que ha generado controversia, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ha ordenado la suspensión de toda la ayuda militar a Ucrania, hasta que se pueda asegurar que los líderes ucranianos demuestren un compromiso genuino con la paz. Esta medida se produce después de las diferencias en el Despacho Oval con el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, que puso en duda el apoyo de Estados Unidos, el aliado más importante de Ucrania, al no garantizarse avances en un acuerdo de paz duradero.
Según Bloomberg, un alto funcionario del Departamento de Defensa, quien pidió mantenerse en el anonimato, todo el equipo militar estadounidense que no se encuentra actualmente en Ucrania quedará en pausa. Esto incluye tanto las armas en tránsito a través de aviones y barcos, como las que se encuentran en áreas de tránsito en Polonia. La orden de Trump fue transmitida al secretario de Defensa, Pete Hegseth, quien fue instruido para ejecutar la medida. Esta decisión eleva la presión sobre Zelenskiy, quien había solicitado garantías de seguridad durante su reciente reunión con Trump, buscando asegurar que Rusia no violara un posible acuerdo.
El presidente Trump ha sido un firme defensor de poner fin rápidamente a la guerra entre Rusia y Ucrania, que comenzó con la invasión rusa hace tres años. En el encuentro reciente en la Casa Blanca, Trump expresó frustración, indicando a Zelensky que debería regresar cuando estuviera listo para la paz, lo que refleja una postura más dura sobre la postura ucraniana en las negociaciones. Esta respuesta de Trump ha dejado en una posición difícil a los aliados europeos, quienes están buscando alternativas para mantener el suministro de armas a Ucrania y preparar el terreno para un posible acuerdo de paz.
La situación ha destacado las limitaciones de los aliados europeos en cuanto a la capacidad de suplir las armas y recursos militares que actualmente proporciona Estados Unidos. A pesar de los esfuerzos diplomáticos de Francia y Reino Unidopara negociar una tregua y un plan de mantenimiento de la paz, Europa no tiene la misma capacidad para ofrecer armas avanzadas, y se teme que los suministros de armas a Ucrania solo duren hasta el verano de 2025.
Aunque la medida tomada por Trump no especifica la cantidad exacta de ayuda que quedará suspendida, se sabe que incluye la entrega de municiones críticas, sistemas de cohetes de lanzamiento múltiple guiados, armas antitanque, y otros sistemas clave que Ucrania necesita para mantenerse en pie frente a la invasión rusa. Además, esta pausa podría afectar los contratos existentes con la industria armamentística de EE. UU., lo que podría implicar compensaciones económicas a las empresas que han comenzado a cumplir con estos pedidos.
Cabe destacar que Estados Unidos y Ucrania habían avanzado en la firma de un acuerdo que permitiría a EE. UU. obtener una parte significativa de los ingresos futuros derivados de los recursos naturales de Ucrania. Sin embargo, tras la reunión con Trump, el acuerdo parece haberse estancado, lo que podría tener repercusiones importantes para la relación entre ambos países.
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