Spotify se ha convertido en la principal plataforma de streaming en el mundo, con más de 626 millones de usuarios y 246 millones de suscriptores en más de 180 países. Sin embargo, el modelo de pago por streaming de la plataforma ha sido motivo de debate entre los artistas, quienes critican que las regalías recibidas son insuficientes para sostener una carrera musical.
El modelo actual, conocido como streamshare, distribuye aproximadamente dos tercios de los ingresos generados por Spotify (de suscripciones y publicidad) a los titulares de los derechos de las canciones. Estos incluyen sellos discográficos, distribuidores y sociedades de gestión colectiva, que luego pagan a los artistas según sus contratos. Esto significa que los artistas independientes, que se autopublican, reciben una mayor parte de las regalías, mientras que aquellos firmados con grandes sellos obtienen una fracción de lo recaudado.
Limitaciones del sistema actual
El sistema de streamshare ha sido criticado por favorecer a los artistas más populares y a las grandes discográficas, mientras que los músicos independientes luchan por obtener ingresos significativos. Actualmente, se estima que los artistas ganan entre 0.003 y 0.005 centavos por reproducción, aunque esta métrica no es del todo precisa, ya que depende del total de reproducciones y del número de suscriptores que la música de un artista ha generado.
Un desafío adicional para los artistas es que Spotify ha comenzado a eliminar los pagos por canciones que no alcanzan las 1.000 reproducciones anuales, una medida que busca redirigir los ingresos hacia los artistas que tienen un mayor impacto en la plataforma. Esto ha generado críticas, ya que muchos artistas emergentes dependen de estos pequeños ingresos para seguir creando música.
Propuestas para un cambio en el sistema de pagos
En respuesta a las críticas, algunas organizaciones de artistas están pidiendo un cambio hacia un sistema centrado en el usuario, donde las regalías se paguen directamente en función de lo que cada usuario escuche. En este modelo, si un usuario solo escucha la música de un artista en particular, ese artista recibiría directamente una parte significativa de la suscripción de ese oyente.
Además, en marzo de 2024, los representantes estadounidenses Rashida Tlaib y Jamaal Bowman presentaron la Ley de Salario Digno para Músicos, que propone un nuevo sistema de regalías por streaming. Esta ley garantizaría que los artistas reciban al menos un centavo por reproducción, sin la intervención de intermediarios, lo que mejoraría significativamente los ingresos de los músicos independientes.
Perspectivas futuras
A medida que los precios de suscripción en plataformas como Spotify continúan aumentando, los artistas y las organizaciones de la industria están presionando para que los cambios en el modelo de regalías se implementen. Aunque el sistema actual ha permitido la expansión del streaming, es evidente que muchas de sus estructuras necesitan ser revisadas para garantizar una compensación más equitativa para todos los artistas, no solo para los más populares.
Si bien el streaming ha revolucionado la forma en que consumimos música, también ha dejado al descubierto profundas desigualdades en la forma en que se distribuyen los ingresos. El futuro del pago por streaming podría estar a punto de cambiar, y las propuestas legislativas como la Ley de Salario Digno podrían marcar un antes y un después en la industria musical.
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