Nuestro país ha experimentado un crecimiento económico vertiginoso, envidiable para muchos países de la región. Mientras algunos países han visto su desarrollo estancarse o incluso retroceder debido a una serie de malas políticas y a la judicialización de la política, República Dominicana ha avanzado de manera significativa. Sin embargo, este no es el tema central de esta nota.
La expansión económica de República Dominicana ha permitido el surgimiento de muchos negocios que antes no existían. Recuerdo cuando llegué a vivir aquí en el año 2006; el único negocio 24 horas era Rico Hot Dog. Las opciones para salir de noche incluían ir a Fridays o dar un paseo por Acrópolis, un nuevo centro comercial cuya mayor atracción era la tienda Zara.
El cambio que ha experimentado el país ha propiciado la aparición de nuevos negocios, conceptos innovadores, líderes de opinión y medios de comunicación. Todo esto ha contribuido a la construcción del sueño dominicano, el sueño Alofoke, que es sinónimo de superación, de tener su propio negocio, de ser su propio jefe y de poder afirmar con orgullo que en Dominicana hay movilidad social.
Santiago Matías, conocido como Alofoke (un personaje que no debemos perder de vista), ha sabido interpretar al consumidor dominicano. Su contenido ha trascendido las fronteras de la bella Quisqueya, posicionándose como uno de los streamers con mayor cantidad de visitas, atrayendo la atención tanto local como internacional.
El éxito de su plataforma y, por ende, su posición económica ha inspirado a muchos jóvenes. Estos jóvenes sueñan con alcanzar una movilidad social y con tener oportunidades que no necesariamente se encuentran en un trabajo tradicional, sino emprendiendo, que les permita alcanzar ese sueño de independencia financiera, de contar con su propio negocio o trascender más allá del mar Caribe.
Emprender no es fácil, menos del 5% de los negocios que se inician superan los 3 años. Existen factores que desmotivan al emprendedor, como la carga tributaria, la competencia, el desánimo social o un mal modelo de negocios. Pero hacer que los negocios prosperen es posible, y un ejemplo es Alofoke, por eso es tan admirado por muchos. Cuáles son, a mi entender, las características que han permitido su superación:
- Autodeterminación: Una persona que inicia un negocio sin confiar en él y sin tener la valentía de permanecer está destinada a un tiempo limitado o rápida desaparición.
- Conocer su nicho: Alofoke sabe perfectamente a qué público está enfocado y no le ha interesado moverse de ahí, que es uno de los errores de muchos emprendedores, tratar de quedar bien con todo el mundo.
- Asociarse: Nadie crece solo. Los negocios de único dueño y capital propio tienen un techo bajito. Para lograr crecer es necesario tener buenos socios y/o endeudarse (algo que muchos temen).
Podrían existir más factores, pero estos tres son fundamentales para poder alcanzar los sueños y estoy seguro de que Santiago lo sabe y lo ha replicado.
Aspiro a que este sueño dominicano siga creciendo y no se limite únicamente a Alofoke. Espero que podamos convertirnos en una «Startup Nation» y que periódicamente podamos hablar de nuevos talentos y negocios, más allá del streaming o YouTube.
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